El bollo suizo (a veces simplemente suizo) es un bollito elaborado tradicionalmente en las pastelerías madrileñas.
El nombre originario dado a este tipo de bollo madrileño es el de bollo de leche y se servía como desayuno y merienda habitualmente en los cafés de finales del siglo XIX en Madrid. La oferta tan exitosa que se hacía de él en “Café Suizo” hizo que al principio se les denominase «bollos del suizo» y finalmente simplemente como «suizos». Su elaboración fue muy popular a comienzos del siglo XX cuando se introdujo en la repostería española la conocida como levadura francesa, denominada así por ser procedente de la factoría francesa de Singer.
Se trata de un bollo elaborado con una simple masa brioche que posee como característica externa, una hendidura en su superficie sobre la que se asienta azúcar en polvo y cristalizada. Tiene una forma redonda de media esfera. Este condimento dulce se incluye justo al salir del horno, lo que hace que tenga un aspecto crujiente y bien adherido a la superficie. Se suele tomar en los desayunos pero cada vez se va extendiendo la tendencia de tomarlo en las meriendas.
En Panadería Guijarro los venimos haciendo desde hace un par de años con la receta tradicional y alguna que otra mejora para darle nuestro toque característico y único.
Ingredientes:
- Azúcar
- Huevos
- Mantequilla
- Leche
- Sal
- Masa madre
- Ralladura de naranja y limón
Una vez hecha la mezcla de todos los ingredientes, dividimos en porciones para dar la forma típica, los colocamos en la bandeja de horno, espolvoreamos con azúcar y los cocemos a 210º unos 8-9 minutos
Buen provecho!