El cotidiano y sencillo placer del tapeo llega a su máxima expresión gracias a algunas de las piezas más humildes pero emblemáticas de la panadería española, los picos. Es común que los picos se elaboren con una masa dura, refinada, que exige su manipulación a rodillo, por lo que su elaboración casera necesita de músculo y paciencia.
Es imposible saborear un buen jamón serrano sin tener a mano unos suculentos picos. Tampoco es igual degustar una ensaladilla con o sin regañás artesanas.
En este post vanis a hablar de uno de los principales «acompañamientos» de nuestra gastronomía, los picos. Lo que más engancha según algunos expertos es el «crujido», que también se encuentra en el pan recién hecho. Pero ¿es un producto solo de Andalucía? Evidentemente no lo es pero es cierto que en Andalucía son muy demandados.
En Panadería Guijarro no vamos a revelar la receta con la que elaboramos nuestros famosos picos, pero sí podemos contar que se realizan con un proceso de elaboración similar al de sus comienzos, que «básicamente se amasa cada día, y cada variedad tiene una receta. Eso sí, se hacen de forma manual al estilo tradicional y se hornean. En la actualidad los podréis encontrar de pan blanco y de pan 100% integral.